domingo, 20 de marzo de 2011

- Nostalgia -



Hace unos días, en una de mis muchas búsquedas por la red descubrí esta película. De entrada diré que, cinematográficamente hablando, no creo que sea nada del otro mundo. No parece un gran guión, ni cuenta nada especialmente original ni llamativo, pero... me hizo llorar y sonreír a partes iguales... me emocionó. Es una película que, para los que vivimos la infancia o la adolescencia en aquellos añorados años 80, sabe tocar la fibra. En mi caso, en la película se muestran situaciones y momentos que me son muy familiares, y me traen a la memoria muchos momentos felices y otros bastante tristes.

La película empieza con las fotos de unos niños, imágenes de la infancia, y la voz en off de una mujer de avanzada edad haciendo una breve reflexión a modo de consejo, la esencia de la película. No contaré la película, ni mucho menos, pero sí querría transcribir aquí esa reflexión:

"Recordad este momento, guardad los olores y la sensación del sol que quema, y el agua que os salpica la espalda. Los amigos... Todo esto cambiará. Pasarán los años, las tardes se harán más cortas, y cada vez os costará más encontrar momentos mágicos. No tengáis prisa por haceros mayores. Hacedme caso! Un día, el recuerdo de este momento os puede salvar la vida."

"No tengáis prisa por haceros mayores"... qué gran frase! Quién no ha pensado alguna vez siendo un crío, "joder, qué ganas tengo de ser mayor de edad para hacer lo que me de la gana!". Juraría que todos lo hemos pensado e incluso pronunciado en voz alta en más de una ocasión, en la soledad de nuestras reflexiones o hablando con amigos. Qué gran error! Ser mayor, para qué? La vida tiene sus momentos, sus fases, y en cada una de ellas se pueden hacer montones de cosas, vivir grandes momentos y, por desgracia, tener también grandes disgustos (todo viene en el mismo pack). Pero, hay sensaciones que se pierden para siempre...

Momentos mágicos... pueden ser tantos! Esas tardes de verano sin mayor preocupación que la hora límite de volver a casa a cenar, esos paseos en bicicleta por los caminos con nuestros amigos, esos bocadillos sentados en cualquier roca medio perdidos por el monte, esas charlas absurdas pero la mar de trascendentes para nosotros en aquellos días, esos juegos pueriles, y cómo no, esas primeras miradas, esas primeras caricias y ese primer beso... Pero sobretodo, esa inocencia que ya nunca volverá.

Y esta película me ha trasladado a aquellos tiempos. Me ha devuelto a aquellos momentos en que los amigos, las tardes de verano, y una simple sonrisa de aquella chica lo podían ser todo. Recuerdos de seres muy queridos, algunos que se perdieron con el paso del tiempo y otros que ya no están. Me acuerdo de todos vosotros, y también me acuerdo de ti, mi querido y añorado abuelo, estés dónde estés, nunca te olvidaré :)

sábado, 12 de marzo de 2011

- El comienzo del viaje -



Y después de mucho, mucho tiempo pensando en la posibilidad de crear un blog... aquí estoy!

Llevaba meses dándole vueltas a la posibilidad de hacerlo, pero mi nada despreciable pereza me lo impedía. Por otro lado, cuando estaba a punto de decidirme siempre terminaba por pensar... y a quién coño le importan mis pensamientos e inquietudes? Pero, a pesar de eso, por fin lo he hecho.

Creo que será un ejercicio sano para mí. Me servirá al menos para soltar esas pequeñas cosas que me llenan de rabia y desprecio hacia este mundo en el que nos ha tocado vivir. Y si los que lleguen a leerme (que supongo serán muy pocos) no están de acuerdo, me odian o, simplemente, creen que estoy loco, me da exactamente igual. Al fin y al cabo, lo hago como terapia de relajación y por dejar mi pequeñísima huella en este maravilloso y, a la vez, loco mundo de internet.

Lo primero que querría hacer es presentarme, aunque lo haré de un modo muy breve. De todos modos, en todo lo que vaya publicando se me conocerá mucho mejor que diciendo cuatro bobadas ahora sobre mi persona.

No soy ni un crío ni un adolescente, y los años empiezan a dejar huella en mi pequeño cuerpo, pero aún así me siento joven. Creo que, aún me quedan cosas por hacer en este extraño mundo de locos. De jovencillo era tímido a rabiar, pero los años me han ido cambiando. A pesar de todo ello, de ser extremadamente extrovertido, de hacer el esfuerzo diario de hablar con todo el mundo, e intentar ser amable con todo lo que me rodea, el mundo me parece un vertedero y, evidentemente, la mayor parte de sus habitantes, la basura que lo compone.

A partir de aquí, cualquiera que pueda sentirse aludido u ofendido... enhorabuena! Ya no hará falta que sigáis escribiendo vuestro propio nombre en google, existís!

Pero no nos precipitemos, aún creo que hay esperanza. En el fondo sigo creyendo que aún tiene arreglo. Y lo creo porque considero que aunque sólo haya una persona auténtica y verdadera de cada mil, conocerla y seguir viviendo vale la pena.

Creo que como presentación es más que suficiente. No me odieis aún, ya tendréis tiempo para ello y prometo daros motivos más que suficientes ;)

Antes de terminar, quiero darle las gracias a una personita muy muy especial para mí. Conocerla ha sido una las mejores cosas que me han pasado en la vida. Gracias pequeñaja, nunca permitas que "el vertedero" te gane, quítate toda la basura que puedas de encima y sigue pensando, creando y sintiendo.